Cabeza comarcal y centro de servicios de la zona, Tafalla se encuentra 37 km. al sur de Pamplona, muy próxima a Olite.
Atravesada por el río Cidacos, la ciudad mantiene el sabor medieval en su zona alta y ofrece un aire más moderno en la zona céntrica, dedicada al comercio y los servicios.
La plaza es punto de reunión de los tafalleses y escenario de los principales acontecimientos. La original fuente es casi un símbolo de la ciudad.
La tradición popular atribuye su fundación al
primer poblador de la Península Ibérica, Túbal, que da nombre a una calle y al restaurante más afamado de la localidad. Las estrechas rúas medievales del casco histórico, flanqueadas por casas de piedra invitan a pasear sin prisas para descubrir su patrimonio.
Resultan destacables los más de treinta escudos señoriales que adornan las fachadas y algunos
palacios centenarios como el del Marqués de Feria o el
Palacio de los Mencos, éste último unido al convento de las Recoletas por un arco conforma una de las imágenes más representadas del lugar.
La iglesia de Santa María, que guarda celosamente el retablo de
Juan de Anchieta, una de las obras cumbres del romanismo, y restos tanto de la antigua muralla como del antiguo palacio conforman la nómina patrimonial de la ciudad.
Además del mercado semanal que se celebra los viernes, la ciudad acoge el 9 de febrero y desde el siglo XV una de las
ferias de ganado más multitudinarias de la región. Otra feria de ganado tiene lugar el 25 de octubre.
Tafalleses y tafallesas acuden en
romería hasta Ujué el domingo después de San Marcos (25 de abril).
Otra fecha imprescindible para conocer la ciudad es el mes de agosto en el que tienen lugar sus fiestas patronales,
famosas por los encierros de toros y las corridas. Tafalla es conocida además por ser productora de los famosos caramelos "
El Caserío".